viernes, 9 de agosto de 2013

No temas

Este es otro del año pasado.


No temas. No, no temas. Naciste libre, para dar rienda suelta a tu vida, para demostrarle al mundo que un humano también es capaz de volar. No temas, porque el tiempo hará su trabajo: congelará los relojes en alegrías y momentos para que puedas volver a ellos cuando un impulso te falte. No temas, tu alma está esperando que la movilices, que seas tú mismo el norte y la desorientación.

No temas, que tus miedos serán noticias e inmediatamente olvidos, pues si no lo son al menos para ti, la libertad puede que te falte.

¡Oh razón, ¿por qué me castigas?! ¿Por qué te contradices? ¿Será que debo desterrarte para alcanzar el vuelo y trasportarme hacia el nodo al que pertenezco? Si es así, pues entonces vete de mí, porque siembras los peores terrores en mis pensamientos y delirios, y cosechas vendas que me amarran, que me ciegan, que me callan.

Quiero contemplar la realidad, quiero dejar de ser un habitante de la caverna de aquella tan famosa alegoría. Ponle nitidez a mis ojos, que tanta incertidumbre está generando una lucha interna en mi cuerpo.

Dibujo bosquejos de certezas, camino todos los planos, pero ni siquiera sé con claridad sobre qué transcurro últimamente. Busco llenar vacíos, recomponer tristezas; busco en el espacio, en ese infinito mundo de huellas perdidas… de pasados olvidados, de olvidos forzados, de olvidos protectores, de manchas dolorosas. Busco un aliento y lo hago en el polvo, entre cachivaches esperanzados de reconstruir un mapa frágil, pero un camino hacia la potencial verdad.


Es difícil decirte que no temas… pero no dejes de intentarlo.
Federico
30/11/12

2 comentarios:

  1. me encantó leerlo, tiene una mezcla de poesía y relato que me gusta ¿puedo recomendarlo?

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